lunes, 25 de mayo de 2015

¿LIBRO O PELÍCULA?

—Acaban de sacar la película de aquel libro que te gustó tanto y, como te considero toda una autoridad en la materia, quisiera hacerte una consulta: ¿crees que debería ver el libro antes de leer la película? ¿O puedo leer la película sin haber visto antes el libro y, aun así, asimilar intacta la esencia de la historia?

—¿Cómo que ver el libro y leer la película? ¿No será al revés…?

—No, estoy seguro de que es así. Si fuera al revés, habría dicho “alucílep al reel ed setna orbil le rev aírebed”. Y eso no es lo que yo he dicho, ¿verdad que no?

—Doy fe de que no ha sido así. 

—Pues, en ese caso, lo mejor será que te dejes tus arrogancias de intelectual para otro momento y, dado que en este punto parecemos estar de acuerdo, pasar a deletrearme cuál es tu opinión acerca de la pregunta que te acabo de plantear.

—¿Te lo deletreo solo o con leche?

 —Solo, por favor...